miércoles, 27 de octubre de 2010

¿Cómo desarrollar la temática de una canción?

Elegir la temática para una canción suele resultarnos fácil. En donde muchos compositores se pierden es al desarrollarla y eso da como resultado canciones confusas o sin sentido.

Es importante tener en cuenta que una canción dura un promedio de 3 minutos. Por eso es que el contenido debe estar resumido, pero no por eso poco entendible, lo cual no es fácil, cuando además hay que tener en cuenta la rima, la fonética y que la cantidad de sílabas calcen justo en la melodía que se haya creado (aunque esta se puede adaptar en función de la letra).


Define sobre qué quieres escribir

El tema sobre el cual vamos a escribir, posiblemente sea el resultado de un momento de inspiración. Si te acabas de enamorar, quizás quieras expresar lo que sientes en este momento. Lo importante es hacer el enfoque, para que no tengas como perderte.

Con enfoque, quiero decir por ejemplo “el enamoramiento en la fase inicial de una relación”. Y si puedes ser más específico, mejor, porque tendrás un toque de distinción frente a otro montón de canciones que posiblemente hablen de temas parecidos.

Así que una vez que has decidido el tema y el enfoque, el paso siguiente es desarrollar el contenido.


Ordena las ideas y desarrolla el contenido

Un esquema muy común de una canción es verso, verso, estribillo, verso, verso, estribillo. No significa que una canción deba tener esta estructura. Pero te enseñaré para qué se utilizan cada una de las partes, porque asi cuando te veas perdido sabrás como ordenarte de inmediato.

Por lo general el verso se encarga de los detalles de la historia, y el estribillo es en donde con una melodía más pegadiza, resumimos la historia o el sentimiento con la mayor intensidad emocional posible.

Algunas canciones cuentan con una parte C que suele usarse para darle a la canción una variación melódica inesperada. En lo que a contenido se refiere, sirve para expresar el desbordamiento de alguna emoción, pero lo puedes aprovechar para lo que quieras , mientras esté alineado con la historia que has desarrollado.

Es un recurso que queda muy bonito, pero no siempre es necesario. Si tienes un repertorio de 12 temas no te recomiendo incluir en todos ellos una parte C, porque recuerda que es un recurso supuestamente “inesperado”.


lunes, 4 de octubre de 2010

¿Qué es más importante, letra o melodía?

Cuando hablamos de “importante” debemos primero preguntarnos, ¿importante para qué?

Comúnmente tendemos a decir que una cosa es más importante que otra porque eso es válido para el resultado que nosotros queremos obtener, pero ¿lo es también para el resultado que quieren obtener otras personas?

Existen canciones en las cuales su letra no dice absolutamente nada y se vuelven muy populares gracias a que cuentan con una melodía muy pegadiza. En ese caso, la melodía podría decirse que es más importante, porque es lo que hace la canción atractiva.

Por otro lado, tenemos canciones que sus melodías son muy lineales sin prácticamente ningún altibajo ni sobresalto, por ejemplo dentro del rap o hip hop. En este género la letra es la protagonista de la canción y quien tenga mejores letras con mejores rimas, será considerado el mejor rapero.

Por supuesto que también hay de las que tienen una letra muy bien elaborada y una melodía bellísima, pero no por eso son mejores canciones que las anteriores que mencioné.

Por tal motivo, es que no puedo decirte si la letra o la melodía es la más importante, porque todo dependerá de lo que quieras obtener. Lo único que te digo al respecto, es que las canciones con buenas melodías, son más fácilmente recordadas, pero no por eso son mejores o más importantes.

Si haces unas letras espectaculares pero te cuesta hacer melodías, no te frustres porque tu fuerte estará en las letras, aunque si quisieras podrías desarrollar esta habilidad. Si tienes el don de crear melodías movilizadoras, de las que causan impacto, también aprovéchalo sin sentirte menos por no ser un perfecto poeta.

Lo más importante, es que letra y melodía logren fusionarse hasta volverse una sola cosa, que es la canción. En el proceso compositivo, debes procurar que una trabaje a favor de la otra. Te podrá pasar que alguna vez debas acomodar la letra a las exigencias de la melodía y lo mismo al revés. Letra y melodía, están ambas a tu disposición, acomódalas y decide tú mismo cómo se combinan. Por ejemplo, si tienes una letra demasiado larga y justo no entra en la melodía que has creado, deberás decidir si extiendes la línea melódica, cortas la letra, o aceleras la rítmica para poder colocar más palabras en menos tiempo. Cuando compones una canción, permanentemente estás decidiendo qué hacer para obtener un mejor resultado.